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EL OBISPADO DE ALINDAO, EN REPÚBLICA CENTROAFRICANA, ES BLANCO DE SANGRIENTO ATAQUE

Tras varios años de inestabilidad política, religiosa y social, la República Centroafricana, un país situado en el corazón de África, vivió el pasado 15 de noviembre otra escalada de violencia contra los cristianos, que se tradujo en el asesinato de dos nuevos sacerdotes, el ataque al obispado de Alindao (que se encuentra a 250 km de Bangui, la capital), el saqueo e incendio de iglesias, lugares de misión y casas de personas cristianas, y la persecución de estos últimos.

Un poco de historia para comprender esta crisis:

«La República Centroafricana es una antigua colonia francesa, colonizada en 1905 bajo el nombre d’Oubangui-Chari. Hacía parte de Francia, país que se encargaba de su gestión administrativa y económica. Durante mucho tiempo, numerosas empresas francesas explotaron las minas de oro y de diamantes hasta 1960, año en que el país logró su independencia y adoptó el nombre de República Centroafricana.

En marzo de 2013, la Seleka, coalición armada, derroca al presidente François Bozizé mediante un golpe de estado, lo cual desató una violenta crisis en el país. Este golpe de estado generó una explosión de conflictos mortales entre los grupos de autodefensa y los soldados de la mencionada coalición.

Tras numerosos años de crisis cíclicas y de negligencia por parte de la comunidad internacional, el conflicto interno se fue intensificando. La vulnerabilidad de la República Centroafricana ante los conflictos regionales transfronterizos y la participación de combatientes externos, hicieron más difícil la situación y pusieron en evidencia la necesidad de una solución regional al conflicto.

La participación limitada de las poblaciones locales en la resolución de sus conflictos se explica, a la vez, por la herencia de un sector público, cuya seguridad es insuficiente, y por la excesiva concentración de los poderes en manos de algunos individuos, lo cual llevó a que se avivaran las tensiones intercomunitarias, con frecuencia de carácter religioso y tribal.» (Véase versión francesa: http://tangeco.unblog.fr/2016/02/29/explication-historique-du-conflit-en-republique-centrafricaine/)

Si bien la inseguridad y las violencias intercomunitarias eran comunes, y las tensiones seguían vivas, al parecer existió una voluntad política de resolver el conflicto, sobre todo después de la visita del papa Francisco, en noviembre del 2015. Sin embargo, está claro que la situación ha cambiado y que la inestabilidad ha vuelto a imperar.

Esto queda de manifiesto tras los violentos ataques del fin de semana que fueron perpetrados principalmente contra el obispado de Alindao, que igualmente servía de lugar de refugio para los cristianos de esta localidad, llegando a más de 26.000 personas. Durante este ataque 37 personas fueron cruelmente asesinados, entre las cuales se encuentran: monseñor Blaise Mada, vicario general de la diócesis, quien fue quemado vivo, y el padre Célestin Ngoumbango, párroco de la parroquia de Kongbo, quien fue degollado. Pero además de los asesinatos, hubo saqueos e incendios de casas y de refugios improvisados, según las declaraciones de los representantes de la iglesia católica centroafricana, quienes condenaron firmemente estos sucesivos ataques y masacres contra la población civil y contra los religiosos del país.

 

El papa Francisco Conmovido por el destino de ese país, en su discurso del fin de semana, dijo: «Con dolor he recibido la noticia de la masacre que tuvo lugar hace dos días en un campo de desplazados en la República Centroafricana, donde también murieron dos sacerdotes.» Ante la multitud reunida en la Plaza de San Pedro, antes de rezar el Ave María, prosiguió: «A este pueblo tan querido por mí, donde abrí la primera Puerta Santa del Año de la Misericordia, expreso toda mi cercanía y mi amor. Oremos por los muertos y heridos y para que cese toda violencia en ese país amado que tanto necesita la paz.»

Unámonos en oración al papa Francisco para que la paz vuelva a reinar en República Centroafricana, para que el Espíritu Santo toque los corazones de todos y una paz duradera sea posible.

Hna. Hortense Demia-Mbaïlaou, sp.

*Hna Hortense es originaria de República Centroafricana.

** Hasta el 15 de noviembre ya van 8 religiosos y numerosos cristianos asesinados.