El verdadero ser: un proceso para toda la vida

Siguiendo la tradición de los retiros espirituales según la práctica católica, las Hermanas de la Providencia reservan cada año «por lo menos cinco días consecutivos para el retiro» (C45). Según el Evangelio, Jesús, el «maestro de la oración por excelencia» (C38), buscaba momentos de soledad y tranquilidad para orar y meditar. Hoy en día distintas organizaciones católicas allanan el camino de la meditación con retiros hechos a la medida de quienes buscan pasar unos días en estrecha comunión con Dios.

En esta ocasión presentamos el testimonio de la prenovicia Azenette Trongco, quien asistió el verano pasado al retiro «Around the Well» (Alrededor del Pozo) en Mississauga Ontario, junto a mujeres y hombres de vida consagrada provenientes de otras regiones de Canadá.

Estoy agradecida de participar en la experiencia vivificante del retiro para religiosas y religiosos jóvenes «Around the Well ». Este retiro me llenó de inspiración y me  permitió ver la belleza de la vocación religiosa, a pesar de los desafíos que conlleva.

Al escuchar las alegrías y las frustraciones de vivir esta vocación pude cobrar conciencia de mi capacidad para amar y valorar la vida comunitaria. Además, me sentí invitada a reflexionar sobre aspectos de mi vida que necesito desarrollar, en el entendido de que, si no hubiese encontrado a Dios en mi vida, no habría sido capaz de descubrir mi verdadera esencia.

Este retiro me recordó de forma oportuna que debo perseverar conscientemente en mis votos religiosos y seguir viviendo una vida en la que le permita a Dios amarme y sanarme. Fue una semana llena de recordatorios y afirmaciones en la que entendí que cada quien es una obra en construcción, y que alcanzar la verdadera esencia es un proceso que dura toda la vida.

Azenette Trongco, Prenovicia

Hermanas de la Providencia

Provincia Holy Angels

Edmonton, Alberta